El pasado 15 de octubre unos cuantos blogueros acudimos a un
encuentro con Oriol Nolis, a propósito de su primera novela, La extraña historia de Maurice Lyon.
Muchas gracias a Suma de letras por organizarlo, siempre nos tratan muy bien (y
no sólo por el ágape que nos ofrecen) y a Oriol Nolis por prestarse a ello,
cada vez me gustan más este tipo de encuentros, poder hablar de una manera tan
cercana con un autor sobre un libro es un lujo y lo disfruto mucho.
Como os contaba en mi reseña de La extraña historia de Maurice Lyon, cuando oí hablar por primera
vez de este libro, el nombre del autor no me sonaba de nada. El argumento me
atrajo, y cuando indagué un poco más sobre el libro, es cuando descubrí que la cara
del autor sí me sonaba, del telediario de TVE. No creo que sea la única que
tenga prejuicios hacia los personajes de la tele que escriben libros. Considero
que muchos de ellos publican su libro por ser quienes son, no por la calidad de
la novela. Muchos, no todos, obviamente. Pero a mí, en vez de atraerme el que
sea famoso, me echa para atrás. En este caso, como el autor era presentador de
un telediario y el argumento me llamó la atención, decidí darle una
oportunidad, y me alegro de haberlo hecho.
Volviendo al encuentro de ese día, precisamente empezamos
hablando por ese tema, y Oriol nos dijo que él era periodista, y también
presentador, y que el periodismo está totalmente relacionado con las letras. Que
él había hecho cursos de escritura, que tenía esta idea en mente y,
aprovechando unos meses en que no trabajó, volvió al borrador de esta historia
que tenía guardada en un cajón, y la pulió para convertirla en la novela que
hoy es. Y que quería publicarla no por vanidad, si no porque verdaderamente
cree en la calidad de la historia.
El personaje lo tenía claro desde el principio, el argumento de
la historia también, y luego fue ultimando los detalles. Oriol no describe
físicamente al protagonista, solo perfila unos rasgos mínimos; tampoco lo
juzga. Lo que él quería era mostrar cómo es, sus actos y los motivos que le
llevan a actuar así, y que cada uno sacase su propia conclusión. Algunos detalles
de Maurice tienen un punto canalla y gamberro, como él, pero ahí se acaba el
parecido (menos mal) entre el personaje y él.
Hablamos de lo contradictorio que es Maurice, cómo para
distanciarse de su pasado, se acaba ligando aún más a él, y que todas las
personas en alguno (o varios) aspectos de nuestra vida, somos así de
contradictorios, entre lo que queremos hacer y lo que terminamos haciendo. Nosotros
comentamos que siendo un personaje que no cae bien (es medio psicópata, si no
psicópata entero), es muy difícil conseguir que quieras seguir leyendo, y que
él logra que queramos saber qué va a pasar, lo cual es complicado, y dice mucho
a su favor.
Oriol nos contó que algunos lectores le habían dicho que la
historia se les hacía corta y querían saber más, y otros que tenía la extensión
necesaria, pero que él no era partidario de “rellenar” la historia para que el
libro tenga más páginas. Yo creo que es muy buena señal (si la historia no
queda a medias hay o algún cabo suelto, claro) que un libro se te haga corto,
eso quiere decir que has disfrutado con su lectura y que no hay “paja” que
sobra.
También hablamos del arte (muy presente en la novela, casi como
un personaje más). Para Oriol, el arte es algo que te conmueve, en sentido
positivo, íntimamente relacionado con el terreno de la belleza. Y con respecto
a coleccionar el arte, él prefiere hacer una colección de los momentos vividos y
no de objetos. Yo también lo prefiero, en una época en que prima el postureo, para mí lo importante de una
fotografía, no es la foto en sí, si no lo que representa: el momento vivido, la
experiencia, la belleza, la persona con quien compartiste ese instante.
Hablamos largo y tendido sobre el final, lo que nos había
gustado, cómo continúa después de cerrar el libro, una pequeña cosa del final
que a mí no terminó de encajarme, cómo es un libro que, unos días después,
cuando ya ha reposado la historia y se
ha asentado en tu cabeza, te deja aún mejor sensación que cuando lo
acabaste. De eso no puedo contar mucho más, para aquellos que no habéis leído
el libro, pero fue muy interesante poder charlar con el autor sobre ello, y
comprobar cómo de un mismo libro, a unos les atrae más unas cosas, y a otros,
otras diferentes.
A la pregunta de qué historias le han inspirado, Oriol nos
contó que un libro que le había marcado mucho fue Amerycan psycho, de Bret Easton Ellis, novela que leyó de
adolescente y que tantos años después de haberlo leído, tiene un gran recuerdo
sobre él. También mencionó El perfume de
Patrick Süskind, y ya en lo visual, El
silencio de los corderos y la serie House
of cards.
Oriol nos contó que para él, lo más importante es la historia,
más que cómo ésta está narrada. Que un libro realmente te cuente algo, no que
pasen las hojas sin que la historia vaya a ningún lado, y que es lo que él
había intentado con La extraña historia
de Maurice Lyon. Que el tiempo de los lectores invierten en tu libro (con
todas las opciones que hay ahora) es responsabilidad del autor, ofrecer una
historia de calidad.
No pudimos sonsacarle nada de su siguiente proyecto, sólo nos
dijo que tiene un par de historias en mente.
Fue una tarde muy agradable. Oriol se mostró muy cercano, y
dijo que agradecía este tipo de encuentros, porque en las entrevistas tiene que
medir mucho las palabras para no desvelar nada importante del argumento, y que
aquí, como todos habíamos leído el libro, estaba muy a gusto pudiendo hablar
cualquier cosa sobre él. Como podéis ver, el encuentro fue muy ameno y se hizo
corto, síntoma de lo bien que nos lo pasamos.
Vaya suerte que tenéis. Gracias por la entrada. Me apetece muchísimo leer el libro de este autor.
ResponderEliminarBesos
¿Os firmaron ejemplares?.Enhorabuena por el encuentro seguro que fue muy enriquecedor.¿Os dijo algo sobre lo próximo que tiene entre manos?.
ResponderEliminarSiempre son interesantes estos encuentros. Una pena no haber podido asistir. Besos
ResponderEliminarQué buen encuentro... Gracias por compartirlo.
ResponderEliminarBesos.