Título: El noviembre de Kate
Autora: Mónica Gutiérrez
Nacionalidad: España
Roca Editorial, 2016
Roca Editorial, 2016
320 páginas.
Descubrí a Mónica con Cuéntame una noctalia, un libro que se me hizo corto y que me encantó. Y cuando leí Un hotel en ninguna parte, me trasladé a otro lugar donde todo era posible y que me transmitió energía positiva y "feel good" a raudales. Con El noviembre de Kate, Mónica lo ha vuelto a lograr: en la próxima tormenta de mi vida, quiero ser acogida en la casa de Norman, para sentirme arropada y a salvo de las inclemencias.
Argumento
En vísperas de una tormenta de nieve, un viernes tras la barra de
galeón pirata de un bar escondido, un barman recién llegado del Loira espera la
llegada de Kate, la chica del extraordinario cabello flotante y las larguísimas
bufandas.
Kate vive en un edificio antiguo como su propia
tristeza y hace tanto tiempo que se ha dejado llevar por la rutina que ya no
recuerda el sentido de los pequeños detalles, la aventura escondida en las
sorprendentes pistas cotidianas. Un extraño jardín y una emisora de radio
colgada del cielo en una buhardilla de madera constituyen su refugio para ese
otoño. Y, sin embargo, aunque en la pequeña ciudad de Coleridge todos ignoren
las advertencias de un excéntrico meteorólogo, el tiempo está a punto de
cambiar el noviembre de Kate de la mano de un hombre bueno con planes de
venganza, un sábado de tortitas y la risa de los argonautas.
Mi opinión
El noviembre de Kate es un libro ideal para leer en invierno, sentada en el sofá, arropada con una manta y con una taza de té humeante mientras afuera oyes llover. O en verano, con un calor asfixiante y un té helado intentando mitigar las altas temperaturas que hacen que te ases, mientras Kate te transmite el frío que ella intenta paliar con sus capas de ropa y su enorme bufanda. Sospecho que el autobusero vio el libro que llevaba en la mano e intentó solidarizarse conmigo y mi lectura tan poco "veraniega" poniendo el aire acondicionado más alto que en el polo norte, haciendo que necesitase para mis trayectos una bufanda como la de Kate. Pero eso es otra historia. Centrémonos en la de Kate...
Kate está triste. Y se ha construido una coraza con su tristeza para no dejar que el mundo se acerque a ella. Se refugia en su anodina vida, en su estresante y deprimente trabajo para no pensar y no sufrir más de lo que ya lo hace... pero al mismo tiempo, se impide a sí misma salir de ese estado y atisbar un rayo de felicidad.
Pero todo va a cambiar cuando comience a participar en un programa de radio (el cual hace que recupere la ilusión), y conozca a Don y sus amigos hackers, con los que descubrirá que tiene algo en común...
Mónica es una experta en crear ambientes cálidos, que te acogen y te envuelven en una atmósfera llena de "buen rollo". Es lo que ahora se denomina "feel good", y es verdad que leer cualquier novela de Mónica te hace sentir bien. En El noviembre de Kate conocemos a dos personajes que están inmersos en una espiral de la que ni siquiera son conscientes: Kate, de una tristeza de la que no puede salir, y Don, de un rencor, producido por una gran pérdida, incapaz de superar.
Conocerse será el bálsamo que ambos necesitaban en sus vidas. Cuando Kate se ve inmersa en la gran tormenta blanca y Don la rescata llevándola a su casa (más bien a casa de su padre, Norman), Kate entrará en otro universo donde se sentirá tan a gusto, tan arropada, que no querrá salir de allí. Y nosotros, como lectores y moradores temporales de la casa de Norman, tampoco querremos irnos. Casi puedo oler desde aquí esas ricas tortitas que nunca faltan los sábados en casa de Norman.
La prosa de Mónica es maravillosa. Sus personajes son entrañables, únicos, encantadores. Y la ambientación que crea es extraordinaria, con esa paz que transmite, esas vibraciones positivas, esa sensación de calidez que te cala bien hondo y que hace que desees continuar otro ratito más en Coleridge con Kate, Don y todos los demás personajes que les acompañan.
Como habréis podido apreciar, El noviembre de Kate me ha encantado: su lectura es un refugio en medio de un mundo caótico, un bálsamo para las preocupaciones y una dosis de energía y "feel good" que recomiendo a todo el mundo. No puedo más que animaros a que conozcáis a Don, a Kate y a su noviembre tan peculiar.
* Si queréis conocer un poco mejor a Mónica, pinchad aquí y leed la entrevista que le hicimos en Somos Alianza. Gracias a todos los que participasteis en la lectura conjunta, y a Mónica por dejarnos ser parte de esos universos tan increíbles que creas.
El noviembre de Kate es un libro ideal para leer en invierno, sentada en el sofá, arropada con una manta y con una taza de té humeante mientras afuera oyes llover. O en verano, con un calor asfixiante y un té helado intentando mitigar las altas temperaturas que hacen que te ases, mientras Kate te transmite el frío que ella intenta paliar con sus capas de ropa y su enorme bufanda. Sospecho que el autobusero vio el libro que llevaba en la mano e intentó solidarizarse conmigo y mi lectura tan poco "veraniega" poniendo el aire acondicionado más alto que en el polo norte, haciendo que necesitase para mis trayectos una bufanda como la de Kate. Pero eso es otra historia. Centrémonos en la de Kate...
Pero todo va a cambiar cuando comience a participar en un programa de radio (el cual hace que recupere la ilusión), y conozca a Don y sus amigos hackers, con los que descubrirá que tiene algo en común...
Conocerse será el bálsamo que ambos necesitaban en sus vidas. Cuando Kate se ve inmersa en la gran tormenta blanca y Don la rescata llevándola a su casa (más bien a casa de su padre, Norman), Kate entrará en otro universo donde se sentirá tan a gusto, tan arropada, que no querrá salir de allí. Y nosotros, como lectores y moradores temporales de la casa de Norman, tampoco querremos irnos. Casi puedo oler desde aquí esas ricas tortitas que nunca faltan los sábados en casa de Norman.
La prosa de Mónica es maravillosa. Sus personajes son entrañables, únicos, encantadores. Y la ambientación que crea es extraordinaria, con esa paz que transmite, esas vibraciones positivas, esa sensación de calidez que te cala bien hondo y que hace que desees continuar otro ratito más en Coleridge con Kate, Don y todos los demás personajes que les acompañan.
Como habréis podido apreciar, El noviembre de Kate me ha encantado: su lectura es un refugio en medio de un mundo caótico, un bálsamo para las preocupaciones y una dosis de energía y "feel good" que recomiendo a todo el mundo. No puedo más que animaros a que conozcáis a Don, a Kate y a su noviembre tan peculiar.
* Si queréis conocer un poco mejor a Mónica, pinchad aquí y leed la entrevista que le hicimos en Somos Alianza. Gracias a todos los que participasteis en la lectura conjunta, y a Mónica por dejarnos ser parte de esos universos tan increíbles que creas.
Qué solidario el conductor del bus, desde luego... xD Esta novela ya la tengo en mente, últimamente veo bastantes reseñas pero me he propuesto leerla con más frío, a ser posible natural (o al menos fresco)
ResponderEliminarBesos
Ya sabes que para mí ha sido una lectura muy especial y me ha encantado.
ResponderEliminarUn beso
Tengo que estrenarme con la autora aún. NO sé a qué estoy esperando :(
ResponderEliminarBs.
Estoy con esta novela y a poco de terminarla me está pareciendo una delicia.
ResponderEliminarUn besito.
Lo he terminado hace poco y lo he disfrutado mucho, y nada más terminar me puese hacer tortitas...
ResponderEliminarBesos
Disfrute mucho con este libro al igual que con los anteriores, Mónica escribe muy bien
ResponderEliminarBesos
La verdad es que hemos sucumbido todos al encanto de Don y de Norman y a la dulzura de Kate.
ResponderEliminarBesos
Me gustó mucho. Un besote
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarJusto lo que espero de una novela de Mónica, estoy deseando leerla, pero voy a esperar a Noviembre <3
Besos!
La acabé de leer hace unos días, y justo ayer comentaba que esta lectura me ha resultado muy acogedora, dulce, cálida...deliciosa! Como todo lo que Mónica escribe ;)
ResponderEliminarBesos
Tengo que leer algo de Mónica pronto. Besos.
ResponderEliminarA mi también me encantó. El personaje de Kate, la historia con Don y toda la ambientación que lo envuelve. Un beso ;)
ResponderEliminarYo la empecé y terminé el viernes, y tengo pendiente mi reseña. También me encantó. Biquiños!
ResponderEliminarEs una autora que tengo pendiente y cada vez le tengo más ganas. Espero poder estrenarme con ella pronto. Un saludo!
ResponderEliminarMe encantaría leer la novela... Besos
ResponderEliminarno lo descarto.
ResponderEliminarBesos
Sin duda la ambientación de esta novela es maravillosa. Besos
ResponderEliminarQue reseña tan bonita, Teresa, muchísimas gracias. Me encanta cuando los lectores me dicen que han estado tan a gusto dentro de mis libros porque de eso se trata, de crear un lugar en donde nada malo pueda pasarnos, en donde estar en paz, protegidas del ruido y la furia ;-) Y la solidaridad del autobusero ha sido un guiño genial.
ResponderEliminarUn beso y muchas gracias.
Es una novela muy cálida a pesar de la tormenta de nieve. A mí me encantó.
ResponderEliminar¡Quiero leerlo, quiero leerlo!
ResponderEliminarBesotes!!!
A mí me gusto mucho Un hotel en ninguna parte. Y como dices esa atmósfeta de buen rollo es parte de la esencia de las histotias de Mónica, reservo este para cuando necesite estar en un sitio mágico y dulce. Vaya todo este rollo para decir que seguro lo leeré.
ResponderEliminarGenial reseña guapa!
ResponderEliminarLos médicos deberían recetar los libros de Mónica!!!
Besos
Tengo muchas ganas de conocer el estilo de Mónica, a ver si aligero pendientes y lo leo.
ResponderEliminarBesitos
Sin duda, lo mejor de este libro las atmósferas y los espacios :) Por cierto, te acabo de seguir desde http://eltiempoliterario.blogspot.com.es también tengo reseña de este libro de hace unos días, por si quieres pasarte ^^
ResponderEliminarNos leemos
Tengo muchas ganas de leer la novela de Mónica, aunque me está siendo esquiva! Espero que caiga para mi cumple o Navidad. 1beso!
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