Un árbol crece en Brooklyn de Betty Smith

Título: Un árbol crece en Brooklyn
Autora: Betty Smith
Año de publicación: 1943

DeBolsillo, 2009

512 páginas

Precio: 14,50 euros

Hay libros que llegan a ti de la forma más inesperada para formar parte de tu estantería, de una muy especial: la de aquellos libros que te han dejado huella y formarán parte de ti durante mucho tiempo. Y ese ha sido el caso de Un árbol crece en Brookyn.

SINOPSIS

Corren los años veinte del siglo pasado y descubrimos a la pequeña Francie Nolan leyendo sentada en la escalera antiincendios de sucasa, a la sombra de un árbol que solo crece en los barrios más pobres de las grandes ciudades. 

Poco a poco, la mirada se aleja de la chiquilla para abarcar a la estrafalaria familia Nolan, que malvive en un barrio de Brooklyn. Conoceremos así a sus padres, a su hermano y a la entrañable tía Sissy, que usa a los hombres para aplacar sus instintos maternales.

Francie crece rodeada de los libros que tanto le gustan y pronto empieza a preguntar y a pedirle a la vida algo más que un triste acomodo en la mediocridad. De esas hermosas y tercas ganas de saber nace Un árbol crece en Brooklyn, una novela donde cualquier detalle de la vida doméstica revela un mundo hecho de apuestas y deseos, donde los personajes son tan próximos que nos duelen sus dolores y donde el sueño americano cobra por fin peso y color.

MI OPINIÓN

Un árbol crece en Brooklyn fue un regalo de mi querida Carla. Se quedó en la estantería, esperando su momento para ser leído. Y esperó y esperó, hasta que por fin Carla y yo lo elegimos para una de nuestras lecturas conjuntas, de esas que intuimos especiales y que vamos comentando y disfrutando aún más que si las hiciéramos en solitario.

El libro está dividido en cinco partes. En la primera, nos metemos de lleno en un día en la vida de Francie Nolan, la niña protagonista de la novela y quien te conquistará por completo. Esta primera parte es la más tranquila, realmente no pasa nada en la trama, pero consigue meterte en la época y en el Brooklyn de esos años, en la vida de la familia Nolan, en su día a día. Esta parte (unas 60 páginas) te piden paciencia, que dejes las prisas a un lado. No cometas el error de pensar que necesitas más “acción” y abandones el libro. Créeme, es una magnífica lectura. Yo me metí en la historia desde el principio, pero entiendo que a algunas personas les cueste un poco más. Pero en serio, créeme, en cuanto empieces la segunda parte ya no podrás soltar el libro: la prosa, la protagonista, la historia, la ciudad de Brooklyn, te cautivarán sin remedio. Y cuando acabes la novela, dirás: “¿Por qué? ¿No hay más? Yo NECESITO más, no puedes dejarme así”.

La manera de escribir de Betty Smith es extraordinaria. Su modo de transportarte al Brooklyn de los años 20 es inmejorable. Y su manera de hacerte formar parte de la familia Nolan es única. Es una novela en la que irás marcando frases y frases, por lo bien escritas que están o por las reflexiones que te provocan.

Cuando nace Francie, su madre Katie tiene un diálogo con su madre Mary que es sublime, sobre la importancia de la educación, la imaginación, la necesidad de ahorrar, el no conformarse con lo que la vida te da y aspirar a más, luchando por una vida mejor que la que el destino ha reservado durante generaciones a tu familia, y que parece imposible de superar.

“La niña tiene que poseer algo muy valioso que se llama imaginación. Necesita crearse un mundo de fantasía todo suyo. Debe empezar por creer en las cosas que no son de este mundo; luego, cuando el mundo se haga demasiado duro para soportarlo, podrá refugiarse en su imaginación”.

En Un árbol crece en Brooklyn vemos crecer a Francie, pasando de ser una niña a dejar la inocencia atrás, convirtiéndose en una mujer fuerte y luchadora. La escritura es su refugio, su bálsamo ante un mundo duro y a veces cruel. Un lugar que le pertenece sólo a ella, donde puede ser quien desee, y donde la realidad y la mentira se entremezclan hasta acabar siendo una sola cosa.

“Bondadosamente, la maestra le explicó la diferencia que existe entre una mentira y un cuento. Una mentira es lo que se dice por maldad o cobardía, un cuento es lo que uno inventa respecto de algo que pudo haber sucedido; en el cuento uno no relata las cosas como han sucedido, sino tal como uno cree que debiera haber ocurrido”.

La relación entre Francis y sus padres me ha parecido buenísima (en especial con su madre, con quien no termina de conectar, pero a quien se parece muchísimo más de lo que ninguna de las dos reconocería jamás). Y también me ha parecido entrañable la relación de los dos hermanos, tan distintos no sólo físicamente, sino también en la forma de ser y de comportarse, pero que no les ha impedido crear un vínculo inquebrantable, siendo el apoyo del otro en todo momento.

Cuando empecé a escribir la reseña, quería contar mil cosas sobre Un árbol crece en Brooklyn, pero me estoy dando cuenta de que en verdad no estoy diciendo nada (o casi nada) del libro. Y es que hablaría y hablaría sobre la novela, pero con quien ya la haya leído. Para quien no lo haya hecho, creo que debe adentrarse en ella sin saber demasiado, sólo que en sus páginas le aguarda una gran historia, con una prosa maravillosa y unos personajes inolvidables, y que, al terminar la novela, la sensación que le quedará es que ha leído algo extraordinario. 

Sin duda, una de mis mejores lecturas de este año. No puedo más que recomendar descubrir esta magnífica novela a quien aún no la conozca.

“Hay que mirarlo todo como si fuese la primera o la última vez. Así tu paso por la tierra estará repleta de dicha".